qué lindo es ser vegetariano

no les dije? sí, soy vegetariana.
y si alguna vez alguien en afán de convencerlos les dijo que era maravilloso, les digo yo con toda la experiencia que
es mentira!!

sí, mentira y de las grandotas.

porque si bien es cierto todo lo que PETA clama en sus páginas, ser vegetarianos en América Latina es un infierno.

¿por qué?

tal vez porque somos pocos (y no somos machos) pero encontrar restaurantes vegetarianos que preparen platos agradables al paladar, no digo deliciosos, es dificilísimo.
la mayoría son medio huariques y tienes al lado un hare krishna que te empieza a adoctrinar y la verdad yo estoy bien así como estoy y no quiero saber más del karma ni nada, sólo quiero comer mi soyita en paz.

además, la mayoría de restaurantes sirven casi todos los platos con algún tipo de carne.
recuerdo que fui a Malabar y en toda la carta, t-o-d-a, sólo había un, sí un, plato sin carne!
casi muero. así que estoy condenada a comer pastas la mayoría de veces que salgo a almorzar a restaurantes.

pero no queda allí, los insumos para prepararse algo en casa son muy pocos. cero variedad y pocas propuestas...
en fin.
el tofu que venden en algunos supermercados es espantoso!!!

ah! pero no faltan los almuerzos de trabajo o reuniones y que se van a resteaurantes de:
a) parrilla
b) pescados y mariscos
c) pollerías

y termino comiendo papas fritas o una mini-ensalada
o algo que no me llena y menos me nutre.
¬¬

conclusión: conseguir una buena comida vegetariana es dificilísimo!!!

ah por si acaso, que yo sea vegetariana no quiere decir que quiera que el resto también lo sea.
es una opción personal.
y el dibujito es porque tengo que ilustrar el post :)

para terminar con las mentiras y el vegetarianismo, no puedo dejar de comentar sobre aquellos que comen pollo y dicen ser vegetarianos, o los que comen pescado y dicen ser vegetarianos.
por favor, una cosa es no comer carne roja y otra muy distinta es ser vegetarianos; así que por favor no anden diciéndole al mundo que lo son.
gracias!