el príncipe azul


sí, a mí también me contaron ese cuento.

cuento, sin mayor misterio, he de decir:
a) princesa hermosa pero medio boba y desvalida (nota mental hacer gala de indefensión para conseguir galán)
b) bruja mala y envidiosa (curioso, nunca mencionan a la suegra)
c) un principe, uno solo, perfecto: atractivo, rico, valiente, con un brioso corcel, encantador, que canta, baila (baila!) que se enamora perdidamente de la princesa. un príncipe puntual (sino la encuentra ya bajo tierra y sin poder salvarla).
d) y un vivieron felices para siempre. siempre

lástima, nadie dijo que todo esto es mentira
y que las mujeres tendemos a ser crédulas (y creer que la realidad es como soñamos).

entonces nos comemos el cuento.
con corona y todo.


ay, me olvidaba de la rana!

en algún momento se menciona que a un príncipe una bruja mala lo convirtió en rana (sapo si prefieren), entonces en nuestra adolescencia pensamos que a mayor cantidad de ranitas que besemos mayor chance de que encontremos a nuestro príncipe azul.

y muchas se toman el trabajo de volverse besuqueadoras indiscriminadas a ver si esta vez le acertaron.
claro, no suelen pasar muchas ranas (si es que la niña es avispada) para que se den cuenta que la rana sigue siendo una ranita muy simpática y saltarina, pero de príncipe anda.

aquí es cuando la historia se bifurca.
o la muchacha de la historia se dedica a seguir besuqueando ranitas a ver si le liga
o se conforma con la que considera que es una ranita simpaticona y se trata de olvidar de su príncipe azul mientras la mira con ternura. y espera nunca, nunca cruzarse con su príncipe (que debe estar por algún lado pero ya para qué si la ranita está bien).

o se da cuenta que todo es una mentira:
que ella es una mujer, que no es indefensa (y además está equipada con una buena delantera para amortiguar golpes). que no es una princesita delicada y frágil
que los pocos príncipes que hay pertenecen a poco favorecedoras monarquías
y que se las puede arreglar bastante bien sin príncipes ni ranitas.

y que tal vez más adelante se pueda encontrar con algunos mortales que no quieran princesas ni mamás
tal vez

12 mentirosos:

Anónimo dijo...

A decir verdad nunca me creí la historia de los príncipes, ya que mi mundo fantástico de pequeña se dedica a recrear grandes mundos flotantes o de dulces (la imaginación que me gastaba XD).

Muchas mujeres todavía andan con el vestido de novia en la cartera, o es por que todavía creen en ese cuento azulino o es que las ranitas se le escaparon.

Saludos

Public enemy dijo...

Cuanto daño hicieron los hermanos Grimm!

electra dijo...

antídoto contra los príncipes azules, shrek!
otra perspectiva, menos encantadora, menos edulcorada, pero, creo yo, mucho mejor para construír...

besos!

Anónimo dijo...

Y la pregunta es... porqué azules? Bien podrían haberlos verdes...
La verdad nunca me gusto este tipo de historias XD

Anónimo dijo...

Es más muchos de los cuentos que adopto Disney son en realidad críticas sociales su época. Como fue Alicia en el país de las maravillas y blanca nieves. En sus versiones originales eran realmente trágicas.

Así que Disney es el culpable XD

Saludos.

Unknown dijo...

nav!'s
como simpre tu mirada muy interesante.
pero al final las únicas culpables somos nosotras por comernos el cuento (y las q guardan el vestido en la cartera)

public enemy:
ellos no querían, estoy casi segura

electra:
un ogrito para una princesa medio ogra. sí, menos edulcorada y mejor para contruir. pero qué de malo tiene el aceptar que somos plebeyas y no princesas?

pinwino:
por la sangre azul de la realeza.
además, es mi color favorito
:)

Mary Lovecraft dijo...

me gusta descubrir en según qué casos, que todo...¡es mentira!

y que me gusta más de esta manera :D

un beso guapa, y gracias por pasar por mi blog!

electra dijo...

q tiene de malo aceptar q no hay príncipes?
q tal vez la historia cambie, y en lugar de una cenicienta, blancanieves, ariel, etc... (q son plebeyas, haciendo méritos o esperando al príncipe azul), la cosa es al contrario...
q si los cuentos estuvieron plagados de plebeyas y príncipes, pq no de princesas y plebeyos? o mejor aún... de gente q escribe su propio cuento?
me sé la respuesta... disney quebraría...

q no hay príncipes
q no hay q hacer méritos
y q no hay q esperar q vengan a rescatarla a una de todos los infortunios...

por eso me gusta shrek, una princesa q no es princesa, q no espera q la rescaten, un príncipe q de encantador no tiene nada, un hada madrina malvada, un rey sapo, y un protagonista q prefiere ser un ogro... q se equivoca, y aprende...
(dreamworks debería pagarme un plus por promocionar sus películas ¬¬)

ni princesas, ni plebeyas... sólo nosotras...

Unknown dijo...

mary lovecraft:
gracias a ti por pasarte!

electra:
eso mero, wapa.
eso mero.

Antón Abad dijo...

¡Croac!, no nos haga eso Analix ¡Croac!..
Con lo que nos costó en sobornos y dietas a los contadores de cuentos.
¿Y qué hay de las princesas que son todas hermosas, y desvalidas?; ¿acaso no terminan convirtiéndose en suegras?... ¡Croac!

¡Vale, empecemos otra vez!:
Había una vez, una mujer normalita (aunque cuando se arreglaba parecía una princesa), y un pobre tipo que no creía en los finales felices y se dedicaba a la promoción (casa por casa) de las famosas aspiradoras "Carpe Diem"
Como no vendía casi, decidió cambiar de empleo y se hizo cirujano plástico. Hoy le va de maravillas y se caso con Norma Lita. Ella ahora, es como una princesa, y en sueños, se entretiene con ranitas guapas y canallas.

Unknown dijo...

maestro!!!

- YOGUR - dijo...

Me ha encantado tu planteamiento. A mi es que siempre me han caido simpáticas las ranas fíjate tú, me da igual que no se conviertan en princesas, con que me reciban 'siempre' (O hasta cuando se pueda) con una sonrisa ya me vale ;P